Introducción

La presente obra tuvo como objetivo analizar la distribución geográfica de los casos de morbilidad por picaduras de animales ponzoñosos (arañas y abejas) en la Jurisdicción Sanitaria 02 de la Zona Norte del Estado de Guerrero, de la Secretaría de Salud, en México. Básicamente, se recopilaron datos estadísticos del año 2007 al 2016 en dicha dependencia. Destaca cómo los municipios de Huitzuco, Taxco e Iguala fueron los que presentaron el mayor número de casos de morbilidad de los padecimientos en cuestión.

Como propuestas prioritarias se sugieren 1) cursos constantes de información sobre medidas preventivas en poblaciones de difícil acceso y 2), es indispensable que en la Jurisdicción Sanitaria 02 de la Zona Norte del Estado de Guerrero, de la Secretaria de Salud se actualicen las bases de datos acerca de los casos de mortalidad por estas intoxicaciones, ya que en esta dependencia comentaron que dicha información no se encontraba registrada (o bien no se proporcionó, desconocemos la razón).

Creemos que es prioritario tener acceso a este tipo de estadísticas, sobretodo para consolidar trabajos serios relacionados con este problema de salud pública, y evaluar el impacto que generan en la población afectada.

Otro problema fue básicamente que, tanto los casos de mordedura de araña tóxica, como los de picadura abeja, se anotaron juntos en un mismo listado en los datos que proporcionó dicha Secretaría de Salud, por lo que no es posible conocer cuantos fueron específicamente del grupo de arañas, y cuantos de la categoría de abejas.

En la presente investigación se parte del concepto teórico de Morrone et al. (citado por Contreras et al., 2001:33) relativo al término de biogeografía. Dichos autores definen a la biogeografía como:

“[…..] la disciplina que estudia la distribución de los seres vivos, tanto en el tiempo como en el espacio, considerando también los procesos que dieron lugar a dicha distribución. Básicamente esta disciplina presenta dos vertientes: la biogeografía histórica y la biogeografía ecológica” (Ibíd:33).

También se toman en cuenta los trabajos en geografía de la salud de autores tales como Dubos (citado por Iñiguez, 1998:704). Según dicho autor:

“La situación de salud de un espacio poblacional dado, en un momento dado, está influenciado tanto por los avatares de las formaciones económicas, de las persistencias de origen natural (clima, suelos, relieve y otras), como por la experiencia biológica de la población en contacto con diversos agentes patógenos” (Ibíd:704).

Básicamente, en la presente obra entendemos a la geografía de la salud como el área científica interdisciplinaria, transdisciplinaria, y multidisciplinaria encargada de estudiar la distribución territorial de los factores ambientales y socioculturales que determinan patologías (endémicas, epidémicas y pandémicas), que impactan y afectan a una población en un espacio o frontera delimitada.

Metodología

El escrito se enmarca en el área de biogeografía, y geografía de la salud. Se analizaron los datos cuantitativos sobre morbilidad obtenidos en la Jurisdicción Sanitaria 02 de la Región Norte del Estado de Guerrero, de la Secretaría de Salud. Dicha información abarcó específicamente los años del 2007 al 2016.

Los datos estadísticos de la dependencia de gobierno mencionada fueron registrados en 110 centros de salud, distribuidos geográficamente en los 16 ayuntamientos que conforman la región norte.

Las especies de arañas en México y en el Estado de Guerrero

Los animales venenosos y ponzoñosos son un peligro latentes para el hombre, lo que abarca especies de invertebrados y vertebrados, tanto acuáticas como terrestres. Las arañas encajan a la perfección dentro de dicho conjunto. Son el animal más cosmopolita del planeta y habita en todos los continentes. En México se les puede localizar en todo el territorio. Al igual que con los alacranes, los encuentros de estos seres vivos con los humanos son accidentales.
Afortunadamente, las especies o familias más tóxicas de arácnidos solo inyectan una pequeña cantidad de su poderoso veneno en cada mordedura. Dichos ejemplares poseen un dispositivo traumatogénico, es decir, una glándula ponzoñosa y órganos asociados que les permite introducir la ponzoña en los tejidos de la víctima.

La intoxicación por la mordedura de arañas tóxicas está reconocida en la clasificación internacional de enfermedades, en la categoría de:

“CIE-9.- E905. Animales y plantas venenosos como causa de envenenamiento y reacciones tóxicas. E905.1 Arañas venenosas (Araña marrón, Araña viuda negra, Tarántula venenosa)” (Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad, 2012:1177-1178).

Autores como Tay-Zavala et al., (2004:10) señalan que “En México, existen aproximadamente 50 familias que comprenden 1,600 especies, pero de éstas solamente las familias Theriidae y Loxoscelidae, con los géneros Latrodectus y Loxosceles respectivamente, causan problemas al hombre” (Ibíd:10). En el mismo sentido, “En México se han registrado 35 a 37 especies del género loxosceles” (Gertsch; Gertsch y Ennik; y Berea et al. citados por Dzul et al., 2014:909).

La mordedura de los arácnidos en muchas ocasiones apenas si se percibe, y en otros casos es indolora. Después de dos horas se manifiestan los síntomas. Al igual que los alacranes, los espacios obscuros de un hogar (como por ejemplo los closets de ropa) son los preferidos de las arañas más tóxicas para elaborar sus telarañas.

Por su parte, Sotelo et al. (2006:104) señala un posible subregistro en los casos de picaduras por arañas en México:

“Las estadísticas oficiales de la Secretaria de Salud (SSA) indican que de todos los casos de intoxicaciones por animales ponzoñosos, 11% es debido a mordedura de arañas. Tal parece que hay un subregistro de estos casos, en los anuarios estadísticos de la SSA aún no tienen apartados específicos para precisar el tipo de araña implicada en el accidente reportado” (Ibíd:104).

Para el Estado de Guerrero también se han estudiado las arañas de mayor importancia médica: “En el Estado de Guerrero se han registrado cuatro especies del género Loxosceles: L. boneti, L. misteca, L. zapoteca y L. colima” (Gertsch; Gertsch y Ennik; y Castaño-Meneses et al. citados por Dzul et al., 2014:909).

“Y dos especies del género Latrodectus (L. geometricus y L. mactans)” (Levi citado por Dzul et al., (2014:909).

Es muy importante mencionar que, tanto Latrodectus y Loxosceles como muchas otras especies de arañas no son agresivas; sólo atacan en defensa propia, y cuando se sienten amenazadas.

Las especies de abejas en México

Las abejas, tienen una gran importancia en la cadena alimenticia. Gracias a ellas y a su veneno, se han fabricado diversos medicamentos para curar enfermedades. De Roodt et al. (2005:215) ha señalado que “Dentro de las patologías humanas producidas por animales con la capacidad de inocular veneno, las picaduras de abeja producen el mayor número de accidentes por animales en muchos países, superando a menudo en mortalidad a los producidos por serpientes, escorpiones y arañas” (Ibíd: 215).

Al igual que con las arañas, la intoxicación por la inoculación de veneno por parte las abejas se encuentra catalogada en el mismo rubro que la intoxicación por la mordedura por arácnidos en la clasificación internacional de enfermedades. La afección se encuentra resaltada en la categoría de “E905.3 Avispones, avispas y abejas” (Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad, 2012:1177-1178).

La magnitud de morbilidad por picaduras de abejas en nuestro país es difícil de estimar debido a la existencia de los subregistros. Básicamente, las picaduras de abejas se caracterizan por la irritabilidad que ocasionan. Tienen un muy mal carácter y son muy susceptibles, y el desenlace de la picadura dependerá de la cantidad de veneno y la sensibilidad de cada cuerpo.

En México existen alrededor de 6 familias (Colletidae, Andrenidae, Halictidae, Melittidae, Megachilidae y Apidae), 20 subfamilias, 37 tribus, 144 géneros y cerca de 1826 especies (Ayala, S/F).

Resultados

Básicamente, la Jurisdicción Sanitaria 02 de la Zona Norte del Estado de Guerrero de la Secretaría de Salud la conforman 16 municipios: Apaxtla, Atenango del Rio, Buenavista de Cuellar, Cocula, Copalillo, Cuetzala del Progreso, General Canuto A. Neri, Huitzuco de los Figueroa, Iguala de la Independencia, Ixcateopan de Cuauhtémoc, Pedro Ascencio Alquisiras, Pilcaya, Taxco de Alarcón, Teloloapan, Tepecoacuilco de Trujano y Tetipac.

Los casos confirmados para cada uno de los municipios señalados con anterioridad se detallan en el Cuadro 1. Se registraron un total de 1213 casos en el periodo considerado en dicha región.

Como se mencionó en el apartado de la introducción, tanto los casos de mordedura de araña tóxica, como los de picadura abeja, se anotaron juntos en un mismo listado, por lo que no fue posible conocer cuantos fueron específicamente del grupo de arañas, y cuantos de la categoría de abejas. En el Cuadro 1 es posible ratificar cómo en el año del 2011 se presentó el mayor número de casos de morbilidad (188 casos). El municipio con el mayor número de accidentes fue Huitzuco de los Figueroa (con 317 casos). Respecto a la distribución espacial, en el año del 2007 los municipios que registraron los datos más altos por dicha afección fueron Huitzuco de los Figueroa (28 casos), Taxco de Alarcón (11 casos), Tepecoacuilco de Trujano (11 casos), y Apaxtla de Castrejón (10 casos) (Figura 1) Para el año del 2008 hubo un limitado contraste, ya que los municipios con los mayores valores fueron Huitzuco de los Figueroa (11 casos), Iguala de la Independencia (10 casos), y Taxco de Alarcón (55 casos) (Figura 2). Para el año del 2009 los incidentes más considerables se ubicaron en Huitzuco de los Figueroa (39 casos), Iguala de la Independencia (12 casos), y Taxco de Alarcón (27 casos) (Figura 3). En el año 2010 los valores más altos se ubicaron en 4 municipios; Cuetzala del Progreso (10 casos), Huitzuco de los Figueroa (43 casos), Iguala de la Independencia (22 casos), y Taxco de Alarcón (31 casos) (Figura 4). En el 2011 destacó Huitzuco de los Figueroa (54 casos), Iguala de la Independencia (55 casos), y Taxco de Alarcón (38 casos) (Figura 5). Para el año 2012 los rubros más dominantes fueron localizados en Huitzuco de los Figueroa (35 casos), Iguala de la Independencia (16 casos), y Taxco de Alarcón (26 casos) (Figura 6). Asimismo, en el 2013 sobresalió Buenavista de Cuellar (10 casos), Huitzuco de los Figueroa (46 casos), Iguala de la Independencia (19 casos), y Taxco de Alarcón (31 casos) (Figura 7). Básicamente, en el 2014 resaltó Huitzuco de los Figueroa (39 casos), Iguala de la Independencia (41 casos), y Taxco de Alarcón (51 casos) (Figura 8). En el 2015 destacó Iguala de la Independencia (66 casos), y Taxco de Alarcón (23 casos) (Figura 9). Finalmente, en el año 2016 los municipios con los datos más prominentes fueron Huitzuco de los Figueroa (13 casos), Iguala de la Independencia (42 casos), y Taxco de Alarcón (18 casos). Lo anterior sobretodo al este, centro y norte de la región, respectivamente (Figura 10). Como se confirmó, se registraron 1,213 casos de morbilidad (con su respectiva ubicación por municipios) en el periodo delimitado. En la (Figura 11) es posible observar la distribución geográfica del total de los sucesos en dicha región. Los datos ratifican cómo el mayor número de casos se ubicaron en municipios en donde existe alta concentración de población, tales como Taxco, Iguala, y Huitzuco. Básicamente al norte, centro, y este del área en cuestión.

Conclusiones

Las nociones científicas vinculadas a la biogeografía y a la geografía de la salud fundamentan la realización de este tipo de estudios. Como se observó, ambas ramas de la geografía pueden utilizarse en una correlación complementaria, sobretodo para analizar los patrones de distribución de especies patógenas, los casos confirmados de intoxicaciones derivadas, así como los costos y consecuencias (en cuestiones de invalidez y/o mortalidad) que pueden provocar en amplias extensiones territoriales. Destacó cómo los municipios de Huitzuco, Taxco e Iguala presentaron el mayor número de casos de morbilidad por mordeduras o picaduras de animales ponzoñosos en todo el periodo considerado. Finalmente, también se confirmó cómo existen muy pocos estudios científicos sobre el área en cuestión (Estado de Guerrero), por lo tanto, no queda más que invitar a profundizar en este tipo de temáticas, e inclusive, a ampliar y confrontar lo expuesto en el presente trabajo Bibliografía
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  • Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad (2012). Clasificación internacional de enfermedades. 9.ª revisión modificación clínica. España: Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad. 1135-1177
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Autores

Dr. Adrián Urióstegui Flores
a_uriostegui@yahoo.com | + Artículos

Universidad Autónoma de Guerrero, México

Licenciatura en Geografía. Universidad Autónoma del Estado de México
Maestría en Estudios Rurales. El Colegio de Michoacán, A.C.
Doctorado en Geografía. Universidad Nacional Autónoma de México
mail: a_uriostegui@yahoo.com

Lic. Luis Guillermo Pineda Cuevas
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